01/10/2024

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Se manifiestan 250 en silencio y con rezos por la paz en Celaya

Celaya, Gto., sábado 12 de febrero del 2022. El primero de febrero, personas armadas entraron  de manera violenta a la casa de José Alberto, su esposa Ma. Del Carmen y su hijo Ricardo Alberto en el barrio del Zapote. Ahí dispararon hacia los moradores en varias ocasiones y les quitaron la vida. Este sábado, al final de su novenario, cerca de 250 personas se reunieron afuera del templo de San Francisco para protestar en silencio y con rezos por la seguridad en el municipio.

Por momentos, una leve llovizna acompañaba el momento en que decenas de personas colocaron veladoras en el piso para formar una cruz. En silencio, niñas, niños y adultos dejaban las velas encendidas mientras a pocos metros de distancia los familiares de don José, Ma. Del Carmen y Ricardo cargaban sus fotografías. Todo en silencio para lanzar un grito y exigir seguridad y justicia a las autoridades por todas aquéllas víctimas de la violencia.

“Se convocó principalmente por mi familia y por toda la gente que ha pasado esta situación. ‘Que porque se confunden’, ‘que porque lo confundieron’, ‘que porque la casa no era esta’, ‘que se equivocaron de personas’. Para toda esa gente que ha sentido el dolor de esa magnitud que nos acompañen a pedir paz más que nada para las familias porque es muy difícil decir ‘ya pasó’. No nos los van a regresar, por eso es esta vigilia”, dijo Catalina Ramírez, hija y hermana de las víctimas.

“Realmente no hay palabras, seguimos en shock. Es de no creerse. Todavía no asimilamos que ya no están, que tuvo que pasar esto… es muy difícil. De las autoridades nos dejan con las manos cruzadas porque no nos dejan hacer nada.

José Alberto y su hijo Ricardo eran campaneros del templo de San Francisco y del templo del Carmen, mientras que la señora Maricarmen preparaba dulces para salir a venderlos y ayudar a la economía de la familia.

Por ello, les resulta inverosímil que algunas autoridades y en redes sociales se haya señalado revictimizado a sus familiares, al señalarlos que podrían estar involucrados con actividades ilícitas.

“Se dio mucho que supuestamente estaban buscando droga y la verdad en mi vida, en todo el tiempo que estuvimos juntos, jamás la vimos ni por aquí, o pensar en algo de eso para sacar dinero, ¡jamás!. Siempre hemos trabajado honestamente, responsablemente y sobre todo sinceramente. Siempre el trabajo hecho fue limpio, por eso queremos que se limpie el nombre, porque en las noticias dicen que ‘era un ratero’ y no es eso, eran gente honesta”.

Y de paso, un mensaje al gobernador Diego Sinhue, quien en reiteradas ocasiones asegura que hay el apoyo de gobierno del Estado para Celaya en materia de seguridad, pero eso no parece tener consuelo en quien les fueron arrebatados sus seres queridos.

“Simplemente que ya agarre un poco más de conciencia de lo que está pasando aquí. No nada más por mi familia sino porque somos muchos celayenses que le dimos el apoyo porque creíamos que nos iba a apoyar y no nada más por esta situación, sino en general a toda la gente que pasa por todo esto. Simplemente apoyo a toda la gente de Celaya porque incluso a los reporteros y todos vivimos con ese miedo de no saber si vamos a regresar a nuestras casas. Sólo le pedimos apoyo para todo Celaya.

“No hay palabras, sólo esperamos justicia pronta. Sin el afán de dañar a nadie pero las autoridades saben lo que deben hacer. Nosotros no podemos hacer nada por mano propia. Podríamos hacer muchas cosas pero no tiene caso quitarles el trabajo a ellos porque no lo saben hacer”.

Quienes agredieron a su familia eran personas jóvenes, que tal vez incluso han lastimado a otras familias en Celaya. Por eso, Catalina manda un mensaje a la gente que pudiera conocer a esas personas que han lastimado a familias celayenses.

“No bajemos la guardia, estemos al tanto que si tenemos gente que lamentablemente se dedica a esto, tener el valor para reportarlo y terminar con todo esto. Hay muchos niños en estas situaciones y no tienen la culpa de la gravedad de los adultos., Muchos adolescentes también que se les hace fácil y se meten a otras cosas que no saben en realidad en qué se están metiendo”, sentenció.