Celaya, Gto., sábado 29 de junio del 2024. No fueron cuatro las víctimas mortales del ataque al bar “Life” la noche del jueves pasado, sino cinco. Nada más que la Fiscalía del Estado no revisó todas las instalaciones y por eso no ubicaron en ese momento el cuerpo de Eduardo ‘N’, el bartender de 28 años que, herido tras el ataque, subió a la bodega en el piso superior a esconderse, pero al querer bajar murió sentado en las escaleras al desangrarse.
“Al parecer los de la Fiscalía que estaban juntando evidencias no lo encontraron porque no quisieron subir, ya que la parte de arriba estaba llena de humo y fue hasta este viernes pasado el mediodía cuando el dueño del negocio encontró el cuerpo, debido a que estaba sonando su teléfono celular. Éramos nosotros que le estábamos marque y marque” contó un familiar de la víctima.
Eduardo ‘N’ no tenía esposa ni hijos, y apenas hacía poco más de un año había entrado a trabajar al Life en la barra de bebidas. Le gustaba lo que hacía, pero nunca se imaginó que la noche del jueves sería su última jornada laboral.
“Yo no sé si era una reunión privada o no esa noche en el ‘Life’ como dicen en algunos medios, sólo sé que Eduardo se despidió de nosotros ese día para irse a trabajar como cualquier día normal. Cuando supimos lo que había pasado preguntamos a la fiscalía si él era una de las víctimas pero no estaba, entonces le estuvimos llamando a su celular y nunca contestó.
“Lo que creemos que pasó es que fue herido en la balacera y alcanzó a subir a la bodega para esconderse y cuando se fueron (los sicarios) intentó bajar pero ya estaba muy mal herido. Solo se alcanzó a sentar en las escaleras y ahí murió. Sin embargo, cuando llegaron los de la Fiscalía nunca revisaron ahí, nunca subieron porque al parecer estaba lleno de humo porque intentaron quemar el lugar. Cuando encontraron a Eduardo estaba todo lleno de tizne por eso”, explicó el familiar.
El cuerpo de Eduardo lo encontró el dueño del negocio pasado el mediodía de este viernes, cuando acudió a las instalaciones previo a la clausura del lugar para sacar algunas pertenencias. En eso escuchó un teléfono celular en la parte de arriba y es cuando se da cuenta que el cuerpo de Eduardo estaba en las escaleras.
“Ahí es cuando lo encuentran. Nosotros le estábamos llame y llame pensando que podría estar herido en algún lugar, por eso escuchó el dueño el teléfono y fue a ver. Al encontrarlo llamó a la Fiscalía y se llevaron el cuerpo al SEMEFO en Guanajuato. Ahora nos dicen que nos lo van a entregar hasta el lunes para poder velarlo y enterrarlo.
“Sé que al decir todo esto no nos va a regresar a Eduardo, pero ¡¿esa es la forma de trabajar de la Fiscalía?, es increíble que no haya encontrado el cuerpo nada más porque no quisieron subir a la bodega porque estaba llena de humo!, es una negligencia terrible”.
Este sábado los familiares de Eduardo acudirían a la Fiscalía del Estado precisamente a interponer una queja por el actuar de los agentes de este caso, pues consideran que debieron revisar todo el edificio y de haber sido así, hubiesen encontrado su cuerpo desde el mismo jueves por la noche y no por casualidad 15 horas después, gracias al timbre de su teléfono celular.
